Elegir de forma adecuada los alimentos que sumamos a nuestra dieta, acompañado de actividad física y otros hábitos saludables, resulta fundamental para el cuidado de la salud.
Algo que no puede faltar en la alimentación son las frutas, por ejemplo, porque brindan numerosas vitaminas y nutrientes que benefician al organismo y ayudan a prevenir enfermedades.
Una fruta ideal por su rico valor nutricional y porque es baja en azúcar son los arándanos. Este alimento proviene de la planta de nombre científico Vaccinium corymbosum, originaria de América del Norte.
Actualmente, son cultivados en otros países del mismo continente y también en Europa con fines comerciales.
De acuerdo al Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, los arándanos son una gran fuente de nutrientes esenciales y se vuelven indispensables en una dieta saludable porque aportan proteínas, fibra, vitamina C y K, antioxidantes y un elevado porcentaje de agua.
Asimismo, posee sólo 4 gramos de azúcar por cada 100 gramos y es baja en calorías. Por lo tanto, es beneficiosa para las personas que buscan adelgazar o controlar su peso corporal.
Por otro lado, contiene en menor cantidad vitaminas B, minerales como fósforo, zinc, calcio, selenio y hierro, y flavonoides.
Ahora que ya conoces sus propiedades, en este artículo te contaremos por qué es importante comer arándanos y cuáles son sus beneficios para el cuerpo.
Los arándanos contienen nutrientes esenciales para la salud, son bajos en azúcar y calorías, son deliciosos y fáciles de conseguir.
Otra característica es que, a lo largo del tiempo, se transformaron en una alternativa para la elaboración de jaleas, pasteles, postres y otros productos.
Por esta razón, su consumo crece cada día más en el mundo entero. Sin embargo, pocos conocen sus bondades y cómo su ingesta diaria beneficia al organismo. Por eso, a continuación enumeramos sus 8 beneficios:
- Protege el corazón: su valor nutricional ayuda a disminuir los factores de riesgo de enfermedad cardiovascular y controlar la tensión arterial.
- Reduce el deterioro cognitivo: incorporar arándanos a la dieta diaria de ciertas poblaciones de mediana edad puede reducir las posibilidades de desarrollar demencia en la vejez, según un estudio de la Universidad de Cincinnati, en Ohio, EEUU.
- Fortalece el sistema inmunológico: sus componentes fundamentales permiten actuar como antioxidantes e inmunomoduladores. Además, su fibra y vitaminas defienden al organismo del ataque de patógenos externos que provocan distintas enfermedades.
- Previene la diabetes: debido a la acción de uno de sus componentes, el pterostilbeno, ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre.
- Ayuda a adelgazar: su bajo contenido calórico en azúcares y carbohidratos la convierten en la fruta ideal para quienes buscan perder peso.
- Mejora la memoria: la antocianina, uno de sus nutrientes, es un poderoso revitalizador de la memoria y puede revertir su pérdida.
- Combate las infecciones urinarias: la abundancia de ácidos orgánicos aumenta la acidez de la orina e impide la proliferación de bacterias.
- Favorece la salud visual: los arándanos son ricos en flavonoides antocianinas, que ayudan a reparar las células nerviosas de la retina.