Los alimentos enlatados son muy prácticos pues son fáciles de almacenar y tienen larga vida útil. Sin embargo, pueden representar también un gran problema si presentan golpes, deformaciones, abolladuras o si están hinchados.
Los productos enlatados con golpes o abolladuras, por más inofensivos que parezcan, pueden ser muy peligrosos. Incluso el más mínimo hundimiento puede indicar la existencia de una perforación microscópica, a través de la cual un microorganismo como el Clostridium botulinum, puede ingresar y contaminar los alimentos.
La Clostridium botulinum es una bacteria anaeróbica, es decir, que se desarrolla en espacios con ausencia de oxígeno. Por ejemplo, en las latas, y durante su crecimiento libera toxinas en los alimentos que pueden causar botulismo, una enfermedad que ocasiona una grave intoxicación, según lo indica la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC), explican que el botulismo es una enfermedad poco común causada por toxinas que afectan el sistema nervioso. Además, puede provocar consecuencias peligrosas como parálisis muscular, dificultad para respirar e incluso la muerte.
Te puede interesar:
¿POR QUÉ ES UN ERROR METER EL TARRO (LATA) DE LECHE EN EL REFRIGERADOR?
2024-05-15T14:26:51Z